MUJER 2


Son tus ojos de niña

que perforan los míos

buscando nieve pura

que mana como silfos.



Son ojos sin miedos. Sin bruma.

Son la libertad deseada.

Son ojos que buscan la pureza de su alma,

donde poder mirarse y sentir la esperanza.



Sus ojos no dan miedo.

Se puede mirar en ellos.

Y bañarse en sus lágrimas.

El sueño que añoraba

había sido consumado y

él no lo sabía, saltó como resorte

al final de su ocaso.



En la marcha anunciada

que a todos acompaña

un corazón palpita

más fuerte que mañana.



Antonio Molina